Cupcakes de coñac con butterswiss de fresas silvestres

Si sois de cupcakes seguro que estos os encantarán por su suavidad y el toque a coñac que rompe con el sabor de las fresitas silvestres de la crema de merengue suizo y mantequilla.

Yo personalmente no soy mucho de buttercream normal, suelo preparar siempre cremas de este estilo que suavizan un poco ese sabor a mantequilla que no me acaba de convencer. Os he decir que yo soy más de postres clásicos, una buena crema catalana o un bizcocho de toda la vida, ya sabéis para gustos...

La masa de los cupcakes la he sacado de un curso que estoy haciendo online de Haute Couture de cupcakes. Es una masa sencilla pero queda espectacular, muy esponjosa y suave, te dan ganas de comer una detrás de otra, al tener 2 clases de harina hace que sea muy ligera. Con las cantidades de la receta salen unos 10-12 cupcakes y unos 24 minis.

Ahí va la receta, que aproveche!!

Besazossss!!

Vanessa

Ingredientes:

Masa:

• 150 gr de mantequilla
• 120 gr de azúcar glas
• 3 huevos
• 2 cucharadas de coñac
• 55 gr de harina de repostería
• 55 gr de Maizena
• 1 cucharadita de levadura en polvo 

Butterswiss:

•  100 gr de claras pasteurizadas
• 200 de azúcar 
• 300 de mantequilla (temperatura ambiente)
• Pasta de fresitas silvestres

Preparación:

Batir la mantequilla con el azúcar hasta que se forma una masa cremosa, separar las claras de las yemas y añadir las yemas y el coñac, remover.

Tamizar las harinas y la levadura y añadir a la mezcla anterior sin batir demasiado.

Montar las claras a punto de nieve y añadir a la mezcla con movimientos envolventes.

Preparar el molde de cupcakes con sus cápsulas y rellenar hasta 3/4 partes de su capacidad.

Precalentar el horno a 180º y hornear durante 20 minutos. Dejar enfriar en una rejilla.

Para la butterswiss, primero pondremos las claras con el azúcar al baño maría hasta comprobar que se ha desecho completamente el azúcar, tocar la clara y notar que ya no están los granitos de azúcar, no más de 4 minutos si no tenéis termómetro, sino hasta llegar a los 60º.  Dejar enfriar un poco el recipiente, hasta templar.

Montar con  varillas hasta formar picos duros, yo lo dejé unos 20-25 minutos. A continuación añadir la mantequilla en dados de uno en uno. Veréis que da la sensación de que se corta, pero seguid batiendo hasta conseguir una textura de crema, de 5 a 10 minutos. Añadir el sabor y si queréis algún colorante. A la manga y listo!