Coca de llanda

Se llama así porque antiguamente se hacía en un molde de lata bajito llamado llanda. Ahora se hace en cualquier molde y queda igual de buena.

Si sois muy de bizcochos como yo, esta coca sin duda os encantará. No hay otra igual en textura, esponjosidad y sabor...y puedo decir que bizcochos he probado unos cuantos... Pasarán los días (aunque es difícil que llegue al tercer día...) y estará igual de blandita y rica. 

El secreto está en las gaseosas que harán que gane en esponjosidad, si no tenéis con una cucharadita de levadura tipo Royal es suficiente.

Está riquísima tal cual porque es tan esponjosa que puedes comer y comer sin miedo a ahogarte como puede pasar con algún bizcocho que hayas comido antes. Con un buen vaso de leche o con un café con leche está realmente delicioso, solo de pensarlo ya me está dando ganas de prepararme uno, mmmm!!
Desde que la encontré en el blog de Sucreart no entra otro bizcocho blanco en casa que no sea este.

La receta original va con canela espolvoreada pero si no os gusta simplemente con azúcar glass es suficiente.

Os pongo una foto de las gaseosas para que veáis las que he utilizado. Son del corte inglés pero creo que las que venden en el mercadona también sirven. Son sobres dobles, uno amarillos y otro blanco. Hay que echar 3 sobrecitos de las 2 clases.

Ingredientes:

• 200 g de azúcar
• 3 huevos
• corteza de 1 limón
• 150 g de aceite de girasol
• 150 g de zumo de naranja (lo puse de botella)
• 250 g de leche
• 400 gr de harina de repostería
• 3 gaseosas de papelillo (las compré en el corte inglés, hay en mercadona)
• Ázucar y canela para decorar al gusto.

Elaboración:

Precalentamos el horno a 180º.

Rayamos la piel del limón y la incorporamos a los huevos junto con el azúcar y batimos con una batidora de varillas. Lo importante es que la masa doble su volumen.

Añadimos el aceite, la leche y el zumo de naranja, mezclamos.

Tamizamos la harina junto los sobres de gaseosa y añadimos a la mezcla intentando no remover demasiado, con movimientos envolventes para que la mezcla no se baje demasiado.

Preparamos un molde rectangular forrado con papel de horno.

Espolvorear con azúcar y canela.

Introducimos en el horno unos 25-30 minutos, si pinchamos con el palillo y sale seco estará lista. Dejar reposar.